Goles de Benzema (2) y Marcos Llorente. El del Girona obra de Pedro Porro.

Comienza a manifestarse la madurez cuando sentimos que nuestra preocupación es mayor por los demás que por nosotros mismos. Albert Einstein (1879-1955)

Hola qué tal, cómo estás. Bienvenido seas otra vez a este pequeño rincón de madridismo. Te prometo que hoy iba a hablarte de la importancia de la Copa del Rey (menor que otras competiciones, sí, pero tal y como está la cosa con la Liga casi imposible, igual tendremos que agarrarnos a este clavo ardiendo); de lo mucho que me está sorprendiendo Solari (está haciendo lo que no hizo Lopetegui, es decir, ser fiel a sí mismo, actuar con conciencia y ser justo con sus jugadores) y del gusto que da ver al equipo jugar a algo (esto no hace falta que te lo explique). Pero por petición popular, gracias Alberto, hoy el tema no puede ser otro que

Benzema, le magnifique!!!

«A semifinales de Copa con un Benzema estelar» … titula la web del Real Madrid.

«Todopoderoso Benzema» … dicen en el As.

«Otro 10 de Benzema» … comenta el Marca.

«Benzema deja al Madrid en semifinales de Copa» … apostillan en el Mundo Deportivo

«Benzema está en un momento de forma espectacular» … glosa la crónica del Sport

«Benzema frustra la ilusión del Girona» … afirman en La Vanguardia.

Y así hasta un largo etcétera. Y yo me pregunto, y tú también, ¿es para tanto?

(www.realmadrid.com)

No me escondo: desde aquí he criticado, y mucho, a monsieur. Y lo he hecho porque sus actuaciones no se correspondían con su prestigio, capacitación, preparación y aptitudes; y porque ni su actitud ni su disposición eran las ideales. Porque, en definitiva, y en palabras de mi madre que creo ya te he dicho en alguna ocasión, era capaz de cabrear a María Santísima. Y lo seguiré haciendo siempre que ocurra lo mismo … lo de criticar, no lo de cabrear a ninguna santa.

Y es que a menudo olvidamos algo que considero es fundamental y que no es ajeno, o no debería serlo, a ningún futbolista … cuanto más todavía a un futbolista del Real Madrid: se le critica cuando lo hace mal y se le alaba cuando lo hace bien. Y por el camino se le apoya siempre. Y ni el que critica ni el que alaba, por el simple hecho de hacerlo, es mejor o peor aficionado que el que opina lo contrario. En la medida de lo posible sería interesante que normalizásemos lo que, en mi modesta opinión, es lo más lógico y lo más sano.

Ergo de  un tiempo a esta parte lo que toca es elogiar y loar a nuestro particular Curro Romero y congratularse de que, ¡¡¡POR FIN!!!, el mejor Benzema está ya entre nosotros; de que, ¡¡¡POR FIN!!!, juega y hace jugar a sus compañeros; de que, ¡¡¡POR FIN!!!, ha dado un paso adelante y de que, ¡¡¡POR FIN!!! es un referente, mejor dicho, «EL» referente. Me cago en mi vida, ¡¡¡SI HASTA MARCA GOLES!!! ¡¡¡Qué más quieres, Baldomero!!!

(www.realmadrid.com)

Cómo bien dice con algo de maldad mi amigo Jesús, compañero de sufrimiento en la grada del Bernabéu, igual teníamos que haberle roto el dedo hace años. Quizá también habría que aplicarle aquella frase de su paisana la escritora George Sand cuando decía que «lo verdadero es siempre sencillo, pero solemos llegar a ello por el camino más complicado«.

Que siga la racha, Karim. Tu alegría será la nuestra.

Dicho lo cual, y ya puestos en ovaciones, vayan desde aquí las mías para Keylor Navas, Marcos Llorente y Dani Ceballos; o, dicho de otra forma, para el afán de superación, para el no rendirse nunca y para el trabajo bien hecho que al final tiene su recompensa.

(www.realmadrid.com)

Por cierto, jugó Marcelo y lo mejor que se puede decir de él es que no la cagó. Por algo se empieza. Deseando estoy volver a ensalzar y lisonjear al, en tiempos no muy lejanos, mejor lateral izquierdo del mundo.

En fin, mañana el sorteo de semifinales. Barça, Valencia y Betis esperan. Ya te contaré.

La bohème, la bohème
Ça voulait dire on est heureux
La bohème, la bohème
Nous ne mangions qu’un jour sur deux

(Charles Aznavour, La Bohème)

Pues eso mismo digo yo. Nos leemos el domingo después del partido de Liga en casa contra el Alavés. Aurevoir, prends soin de toi.