Intentar, desafiar, persistir, perseverar, ser fiel a sí mismo, pelear a brazo partido con el destino, dejar asombrada a la catástrofe cuando ve qué poco miedo nos da, ora enfrentarse al poder injusto y ora rebelarse contra la victoria ebria, resistir, plantar cara: ése es el ejemplo que necesitan los pueblos y la luz que los electriza.

Victor Hugo (1802-1885) Novelista francés.

Hola, qué tal, cómo estás. Bienvenido a este exultante rinconcito de fútbol. Hay muchas formas de alcanzar la felicidad, y, entre ellas, ganar un torneo de fútbol, por muy Mundial que sea, no es la más relevante ni la más trascendental. Peeeero, ya sabes aquello de que el fútbol es la cosa más importante entre las cosas menos importantes (Valdano dixit).

Por tanto, no te cortes y grítalo bien fuerte porque sí, lo has oído bien, somos …

¡¡¡Campeonas del mundo!!!

Y es que sólo el fútbol puede desatar pasión, padecimiento, entusiasmo, sufrimiento, frenesí y delirio a partes (casi) iguales. Sólo el fútbol puede congregar a millones de personas ante el televisor. Sólo el fútbol .. es fútbol. (y con esto damos por finalizada la utilización de perogrulladas en el día de hoy).

Todo comienza con Lucy Bronze iniciando el ataque inglés en el lateral derecho. Primera parte, minuto 28 y diez segundos. Tere Abelleira bien situada, como siempre, obliga a la inglesa a conducir la pelota hacia el centro del campo. Aitana Bonmatí intenta cortar el ataque poniéndose delante de Bronze y gracias a esa presión el balón acaba en los pies de Tere .

Ya te he dicho en numerosas ocasiones que no soy para nada un entendido en fútbol. Mucho menos en fútbol femenino. Te reconozco que, más allá de alguna ocasión puntual, únicamente comenzó a interesarme de verdad cuando el Real Madrid apostó por ellas. Supongo que todos necesitamos un estímulo o un aliciente de vez en cuando que nos haga ver la luz.

Pero a pesar de esta carencia de conocimientos, sí que te diré que hay una cosa que me gusta bastante, y es que, en general, es un fútbol más directo, menos especulativo y, por tanto, para el espectador que se acerca a un estadio con el único ánimo de pasar un buen rato, más bonito de ver y de disfrutar. Y así ha sido esta final.

Avanza la pontevedresa, un toque al balón, otro más y con el tercero abre el balón a la derecha hacia la posición de Mariona Caldentey. En ese momento Olga Carmona ya ha arrancado la moto y está cogiendo velocidad de crucero, mientras yo, lo juro por Snoopy, comienzo a gritar señalándola: ahí, a Olga, a tu izquierda, a Olga, a Olga. (sí, ya lo sé, difícil que me escuchen a 17.600 km, pero .. ¿y si sí?)

Comenzaron las inglesas volcando todo su juego por la izquierda conscientes de que era la zona más vulnerable de nuestra defensa. Aunque sería más correcto sustituir «más vulnerable» por «menos fuerte». Más correcto aún es destacar el excelente Mundial que Ona, Oihane, Ivana, Olga, Laia e Irene han realizado. Han sido la base sobre la que se ha sostenido nuestro equipo y únicamente el día de Japón dieron muestras de flaqueza.

Pero después del último susto inglés en forma de remate que acabó estrellándose en el larguero de la portería de Cata Coll, llegó una primera ocasión tras un centro de Olga al que ni Salma ni Alba Redondo supieron ponerle el lazo, pero que tuvo la virtud de quitarnos los nervios de encima y de permitir que a partir de ese momento Tere y Aitana se hicieran con el mando del partido. Y ya se sabe que cuando el balón está en los pies de las mejores, todo parece y es más fácil.

Control de Mariona y Olga ya está alcanzando a la defensora inglesa. Primer toque de la mallorquina, y Olga ya está la altura de su par. Segundo toque y la sevillana ya ha dejado atrás a la inglesa. Tercer toque de Mariona, y ya están las dos en paralelo. Con el cuarto envía el balón en profundidad para la sevillana, medido y a la velocidad y con la cadencia perfectas.

Y lo que pasó es que llegó la segunda oportunidad clara en un remate de Salma que terminó precipitándose contra el poste. Y pasó también que a la tercera fue la vencida. y fue ella, como gritó y repitió Alicia Arévalo durante la retransmisión (por cierto, excelente locutora y gran descubrimiento, por lo menos para mí): ¡¡¡OTRA VEZ OLGA!!!

Un paso, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho, remate cruzado con la zurda … gol y los consiguientes gritos, abrazos, síes, vamos, vengas, más síes, algún taco y la sonrisa que ya no se nos va a quitar más de la cara. Minuto 28 y treinta segundos y ya estamos deseando que esto acabe.

Como era de esperar, en la segunda parte las lionesses salieron a por todas. Ya no se centraron en atacar sólo por la banda izquierda sino que redoblaron las entradas por todo el frente de ataque. Pero de nuevo entre Tere, Aitana y Jenni Hermoso (que mejoro un poco sus prestaciones en la segunda parte) mantuvieron el control del partido, únicamente soliviantado por los lógicos arreones ingleses.

Con la salida de Oihane por Alba mejoraron nuestras prestaciones defensivas y con la experiencia que aportó la entrada de Alexia llegó la tranquilidad, que ni siquiera se vio alterada por el fallo de Jenni desde el punto de penalti. Poco tardó en llegar el final (unas tres o cuatro horas de nada) y, en consecuencia, la gloria y la inmortalidad de la mano de unas jugadoras que además de jugar, y muy bien, al fútbol, han demostrado que saben sufrir y que, lo más importante, saben ganar.

No sé si será un error comparar a esta selección con la que nos enamoró hace 13 años, concretamente un 11 de julio, pero te diré que ambas tienen una cosa en común: ganaron cuando nadie lo esperaba y aprendiendo de la única derrota que tuvieron para superarse partido a partido hasta la última victoria.

No voy a soltarte eso de que ojalá que este triunfo sirva para que el fútbol femenino despegue por fin en nuestro país (esto es algo tan imparable que ni siquiera un hipotético descalabro en el Mundial lo hubiera ralentizado), pero sí te diré que lo que han hecho estas mujeres, estas jugadoras, es para sentirse extremadamente orgulloso de todas y cada una de ellas y nos refuerza a los que pensamos que fútbol es fútbol … lo juegue quién lo juegue. Que lo disfrutes.